Escritura de guion
Hacer un guion para pódcast narrativos de no ficción requiere escribir las veces que sea necesario hasta que la historia cause la sensación de que está milimétricamente construida. Para hablar sobre este arduo proceso nos acompañaron Daniel Felipe Lizarazo, María Alejandra Roa y Francisco Pabón, coordinador e investigadores de Relatos Amarillos.
*La conversación trata aspectos importantes de Tres Caminos, el más reciente episodio del pódcast original de RTVCPlay.
El primer paso para estructurar un guion es hacer un cuestionario… ¿Qué preguntas contiene? ¿Quién las responde? ¿Para qué sirve?
El cuestionario base que usa el equipo de Relatos Amarillos desde la etapa de investigación para avanzar en una historia contiene preguntas que apuntan directamente a la escritura del guion, entre las que destacan:
1. ¿La historia tiene inicio, nudo y desenlace? Es decir, cuenta con evento detonante, conflicto y resolución.
2. ¿El protagonista sufre una transformación? Esto es importante narrativamente porque representa cuáles son los momentos de cambio o transformación que enfrenta en la historia.
Estos cuestionamientos son importantes en el guion porque enmarcan el conflicto de la historia —fundamental para formular hipótesis narrativas—; sin embargo, no son los únicos. El cuestionario también cuenta con un tercer elemento a destacar: la premisa.
“La premisa, como reflexión última, es lo que nos da cuenta de que la historia nos habla de algo más allá (...). Eso surge de los conflictos que nuestro personaje enfrenta, de esos momentos de decisión en los que él se transformó y encontró algo o nos hizo encontrar algo a nosotros. Por ende, nos deja una premisa, que es como una especie de conclusión o tesis de la historia”: Daniel Felipe Lizarazo, coordinador de Relatos Amarillos.
Hablemos un poco más del evento detonante…
El equipo del pódcast original de RTVCPlay entiende el evento detonante como un momento que irrumpe la normalidad del protagonista y lo enfrentan a varios momentos de decisión para superar ese estado. En la historia de Víctor Manuel ‘Pipe’ Paz González —protagonista del segundo relato— ese fenómeno ocurre cuando decide ser cantante y encuentra en ese oficio su propósito de vida.
¿Cuáles son los pasos a seguir en la escritura del guion?
Una vez el escritor del guion tiene definido el inicio, nudo y desenlace de la historia con evento detonador, conflicto, resolución y momentos de cambio o transformación del protagonista, empieza la estructuración de la misma.
En esta etapa el relato es dividido en actos. La historia de ‘Pipe’ González —escrita por Antonio Ungar— tiene cuatro: cuando era taxista, su paso por el reality de imitadores, el salto al estrellato con la grabación de sus primeras canciones y la ruptura amorosa. Con estos momentos sobre la mesa empieza la secuenciación de la historia.
El rol de la secuenciación: secuenciar es el proceso por medio del cual el escritor del guion hace una especie de ‘árbol de racionamiento’ que tiene el propósito de ir probando los argumentos que sostienen la tesis central de la historia. Esto ocurre en repetidas ocasiones, incluso con las entrevistas hechas, porque aparecen nuevos elementos en la historia que deben ser aclarados.
Para aclarar estos elementos sucede algo interesante: después de hacer una primera entrevista, el equipo de Relatos Amarillos hace una segunda versión de la misma, en estudio, para —además de garantizar la calidad sonora del producto— confirmar la hipótesis.
Esta segunda entrevista además supone dos retos para el escritor:
1. Volver a estructurar y encuadrar la historia que había escrito en el primer guion porque el panorama cambió y lo que antes era relevante pasó a un segundo plano. Esto implica volver a secuenciar.
2. Decidir si la historia realmente funciona —es decir, tiene sentido— o sencillamente es una anécdota suelta.
“Luego de la secuenciación, el escritor selecciona los audios, el trabajo más arduo, (...) de las diferentes entrevistas o archivos para empezar a organizar la secuencia de argumentos y, posteriormente, empezar a escribir los fragmentos narrativos que acompañarán la historia”: María Alejandra Roa, investigadora de Relatos Amarillos.
En la escritura del guion los fragmentos narrativos tienen la función de describir, complementar y reflexionar sobre los testimonios de los protagonistas. Sin ellos en escena el pódcast sería una mera colección de hechos poco interesantes porque no contaría con la temática universal que conecta al público.
La virtud de la estructura circular
Las historias publicadas en Relatos Amarillos comparten una caracteristica: cuentan con una estructura circular. Esto significa que el inicio me lleva al final de la misma. Esto quiere decir que planteo un cuestionamiento inicial al que constantemente vuelvo hasta responderlo.
“En el caso de Arnold Mena lo que hicimos fue preguntar por qué de tantas profesiones en la vida decido dedicarme a hacerle bromas pesadas a la gente con el riesgo que implica (...) entonces al final respondo eso”: Daniel Felipe Lizarazo, coordinador de Relatos Amarillos.
Así las cosas —en el caso de Mena, protagonista del primer camino—, el equipo llena al público de argumentos que refuerzan la idea de que su decisión de ser influenciador lo pone en riesgo y, posteriormente, responde al cuestionamiento inicial: el hombre hace esto porque añora alcanzar una estabilidad que lo aparte de la pobreza.
¿Cómo garantizar el ritmo de una historia?
El ritmo —entendido como la sensación de que una historia avanza de forma milimetríca— viene de la secuenciación porque cada secuencia aporta algo nuevo o desarrolla un nuevo elemento dentro de la misma.
“La sensación tiene que ser que no sobra ni una coma ni una palabra a la historia porque todo está autocontenido dentro de la lógica de la historia (...) si sobra algo es porque nosotros intencionalmente quisimos que fuera así”: María Alejandra Roa, investigadora de Relatos Amarillos.
Así mismo, el ritmo argumental está relacionado con los avances que tiene el protagonista durante el relato. Cada vez que un protagonista toma una decisión, el público tiene la sensación de que ya no está en la misma situación de antes.
Una ardua labor
Escribir el guion de una historia puede demorar meses. Es una labor ardua que requiere escribir, escribir y escribir cuantas veces sea necesario hasta que la sensación general sea que no le sobre ni le falte nada. En Relatos Amarillos algunas historias han sido reescritas hasta siete veces.
Relatos Amarillos es una producción original de RTVC Sistema de Medios Públicos que narra las inusuales historias de los taxistas en Colombia. Escúchelo en www.rtvcplay.co o en su agregador de pódcast favorito.